El cambio de estación supone adaptarse a nuevas situaciones que pueden comprometer nuestra seguridad. En verano los días son largos y soleados, mientras que en otoño las horas de luz cada vez son menos y la inestabilidad atmosférica es una constante.
Por ello, debemos adaptar nuestra conducción y tomar una serie de precauciones para conducir en otoño con total seguridad.
1. ¡Cuidado con las hojas!
El rasgo más característico del otoño también puede ser el más peligroso. La acumulación de hojas en la calzada puede provocar resbalones al pasar por encima de ellas, ¡sobre todo si están mojadas!
Cuando las hojas que se han caído en la carretera están mojadas puede producirse aquaplaning, así que recuerda cómo actuar al conducir en otoño para evitarlo:
- Mantén una velocidad segura y constante. A mayor velocidad, mayor probabilidad de aquaplaning.
- Si adviertes charcos de agua en la carretera, reduce la velocidad.
- Respeta la distancia de seguridad para evitar colisiones con los vehículos de delante y detrás.
- Asegúrate de que los neumáticos están en condiciones: que el dibujo siga siendo visible y que el relieve esté por encima de los 1’6mm
Además, no dejes que las hojas se acumulen sobre tu vehículo. Límpialas y evita que los conductos se atasquen.
2. Haz frente a la visibilidad reducida
Seguro que ya has notado como los días son cada vez más cortos ¡y más aún cuando cambien la hora!
Por ello, recuerda que en cuanto se empiece a hacer de noche debemos utilizar las luces de cruce. No dudes en utilizarlas también durante el día en los días más nublados para ser visto más fácilmente.
Además, si vas a hacer un viaje más o menos largo, ten en cuenta también las horas de amanecer y atardecer para evitar deslumbramientos.
3. Echa un vistazo a la previsión del tiempo antes de salir a conducir en otoño
Un día de otoño te puede salir radiante y a la media hora estar atravesando un banco de niebla. Por suerte, los pronósticos del tiempo son cada vez más fiables y puedes anticiparte a lo que te vas a encontrar. Por ello:
- Comprueba que las luces antiniebla funcionan correctamente
- Revisa que el limpiaparabrisas realiza su función después de haber pasado el verano casi sin usarlos
- No dejes que las lunas se empañen con los cambios de temperatura entre el interior y el exterior.
4. Cuidado con los atropellos a animales.
Parece que el otoño es la época del año en la que más atropellos a animales se producen (tanto salvajes como domésticos). Este hecho está relacionado con las temporadas de caza y con la reducción de visibilidad por la falta de luz.
Si vas por carreteras secundarias en las que sabes que es probable encontrar animales, extrema la precaución y reduce la velocidad.
5. Si pasas la ITV en otoño, realiza una revisión completa del vehículo
El verano puede haber dejado nuestro coche un tanto dañado, por lo que no viene mal ponerlo a punto si tienes que pasar la ITV pronto.
Si eres de los que lo ha utilizado para irte de vacaciones o hacer escapadas, echa un vistazo al nivel de aceite, el líquido refrigerante y el limpiaparabrisas.
Revisa que las luces funcionan correctamente, ya que suele ser el defecto de ITV por el que más vehículos suspenden.
El buen estado de los neumáticos es fundamental en esta época. Así que comprueba la presión y el dibujo de tus ruedas.
Un elemento al que no solemos prestar atención es el limpiaparabrisas, que puede haber sufrido el calor del verano más de lo que piensas. Por ello, comprueba que las gomas siguen funcionando.
Por supuesto, tampoco viene mal un lavado a fondo para quitarle los restos de arena que puedan quedar tanto por dentro como por fuera del vehículo.