Según un estudio de la DGT, la somnolencia y la fatiga son una de las causas que más accidentes provocan entre los conductores y conductoras de nuestro país, por lo que queremos darte unos consejos para evitarlos y que tu viaje no se convierta en una pesadilla.
1- Descansa antes de salir de viaje:
Lo ideal es salir de viaje después de haber dormido unas 7 horas y estando fresco. Sabemos que la mayor parte de las veces no se va a dar esta circunstancia, por lo que, al menos, trata de echar una siesta o descansar bien para salir a la carretera. Especialmente si se trata de un viaje largo
2 – Para cada dos horas como máximo:
La teoría de que hay que parar 15 minutos cada dos horas la conocemos todos, pero también hay que ponerla en práctica. Estas paradas nos ayudan a estar más despiertos y evitar la pérdida de reflejos, por lo que no te confíes y sal a estirar las piernas y beber un poco de agua o zumos cada dos horas.
3 – Evita conducir de noche o en horas en las que sueles dormir:
Por mucha siesta que te eches, si conduces una vez que ha oscurecido tu cuerpo se fatigará igual. Si no tienes otra opción, asegúrate de descansar bien previamente y de hacer los descansos pertinentes para que la fatiga no sea tanta. Igualmente, también deberías evitar el amanecer y el ocaso.
4 – Mantente hidratado:
Hidrátate antes y durante el viaje para evitar que aparezcan signos como rigidez muscular o dolores de cabeza. Muchas veces no nos damos cuenta, pero en los viajes largos nos vamos deshidratando si no bebemos agua de vez en cuando apareciendo así la fatiga.
5 – Mantén una temperatura entre 21 y 24 grados:
Está demostrado que el calor nos da sueño, sobre todo si vamos al volante, y además, puede provocar cierta deshidratación. Por ello, no te pases con la calefacción en invierno y regula el aire acondicionado en verano para mantener una temperatura constante de unos 22 grados. Eso sí, recuerda que el aire puede resecar la garganta así que no abuses y ten una botella de agua cerca por si acaso.
6 – No tomes comidas muy abundantes:
Las comidas copiosas nos dan ganas de echar la siesta ¿verdad? Pues imagínate si te das un buen banquete y te pones al volante: a los 10 minutos querrás echarte a dormir. Tampoco es plan de que no comas nada, lo ideal sería una comida ligerita y nutritiva para que te dé energías en el viaje. Aprovecha también las paradas cada 2 horas para tomar una pieza de fruta o algún refresco para mantener tu actividad a tope.
7 – Pide a otra persona que te ayude a activarte (o pon la radio):
Si viajas con otras personas lo tendrás más fácil para que no te entre sueño ya que pueden conversar contigo ¡pero ojo no te vayan a distraer demasiado! Si viajas solo o sola, lo que puedes hacer es encender la radio y poner algún programa que sea dinámico o llevar preparada esa lista de canciones para conducir que todos tenemos preparada (también puedes utilizar la nuestra)
8 – Revisa los medicamentos que estés tomando
Algunos medicamentos provocan somnolencia y fatiga y son causa del 5% de los accidentes mortales, por lo que echa un vistazo al prospecto antes de salir de viaje.