Hace unos días se presentaba el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia en el que se recogía que “Es preciso desarrollar un sistema de pago por uso de la red de vías de alta capacidad que permita cubrir los costes de mantenimiento e integrar las externalidades negativas del transporte por carretera como sucede en el resto de infraestructuras” por parte del Ejecutivo.
Esta declaración vuelve a traer sobre la mesa la posibilidad de convertir en vías de pago las autovías y autopistas que hasta ahora no lo eran. ¿Está más cerca de hacerse realidad? Aunque aún es solo una propuesta a estudiar, lo cierto es que es la primera vez que se plantea en un documento oficial.
Un peaje que no afectaría a los usuarios por motivos laborales y sí a los más contaminantes
Ya en 2018 se empezó a proponer un peaje que afectaría más a los vehículos que más contaminan con un precio de entre los 0.03€ y los 0.15€ por kilómetro. Una idea que parece que se ha vuelto a recuperar.
Sin embargo, en el caso de salir adelante, se buscaría crear un punto intermedio que no afecte a los que utilizan las autovías de forma diaria o por motivos laborales. Tal y como afirmaba el ministro Ábalos: “A los que no les queda otra, como los que van a trabajar, no tienes por qué gravarlos, pero sí a otros a los que la circulación por estas vías les hace ser más competitivos en su actividad, ya que se benefician del nivel de infraestructuras”.
Un peaje para evitar el déficit acumulado
Según los datos de la AEC (Asociación Española de la Carretera), nuestro país tendría un déficit acumulado de 7.463 millones de Euros por la inversión en la red de carreteras del Estado.
Pero además, ese importe subiría con el plan de liberalización de las autopistas de peaje con el que ya se ha eliminado el pago de varias vías desde 2018. Con estas liberalizaciones y las que están previstas para 2021 (la AP-2 entre Zaragoza y El Vendrell y a la AP-7 entre Tarragona y la Junquera) los conductores ahorrarían hasta 500 millones de euros… que asumirían las arcas públicas.
La idea del Ministerio de Transportes es revertir esa tendencia de déficit con medidas como la planteada. Pero ¿será pronto? En principio no está previsto a corto plazo, así que de momento las autovías seguirán siendo gratuitas para los conductores y conductoras.